Una vez empieces, será una adicción.
Nunca jamás tirarás un hueso de aguacate 🥑
Tener un aguacatero en casa es el sueño de cualquier fan del aguacate. Además, puedes estar tranquilo, aunque se te den mal las plantas, lo aguacates nunca se te darán mal. Eres demasiado fan. Y lo sabes.
En esta entrada encontrarás distintas maneras de conseguir tu objetivo de plantar un aguacate en tu propia casa.
El método Aguatepedia para germinar un Aguacate
Hay varios métodos para plantar un aguacatero en casa. Te voy a explicar primero el que siempre nos ha funcionado en Aguacatepedia.com. Y sí… también hemos pasado por pinchar huesos y meterlos hasta la mitad en agua y esperar meses sin que suceda nada.
No te lo vas a creer pero el secreto para germinar aguacate es meter el hueso dentro de un papel de cocina. Al finalizar este proceso, prometemos que el resultado será haber plantado por lo menos un aguacate que dé fruto.
¿Manos a la obra?
1. Saca el hueso del aguacate cuando esté fresco y maduro. Cuidado con el cuchillo, no dañes la semilla.
Después lava la semilla con suavidad con agua tibia, utilizando un cepillo o un paño. Asegúrate de eliminar todos los restos de fruto antes de plantar el aguacate en casa.
Una vez limpio, lo conservaremos en un vaso de agua durante una semana para que la piel que lo recubre se reblandezca.
2. Varios días después lo pelaremos, quitaremos toda la piel marrón poco a poco, usando las uñas o un objeto que arrastre bien la piel y dejándolo desnudito. Inmediatamente después lo envolveremos en un papel de cocina que esté húmedo, pero no goteando. Yo lo suelo meter debajo el grifo y después escurro el papel.
3. Después meteremos el hueso en una bolsa de plástico especial para alimentos. Las típicas de Ikea con cierre de zip. En Mercadona también las encontrarás. Asegúrate de que la bolsa está bien cerrada para que el papel conserve la húmedad durante varios días.
Colocaremos la bolsa cerca de una ventana. Les encanta el calor. Si tienes doble ventana como yo, coloca la bolsa entre las dos ventanas.
Recuerda que en la cantidad está el éxito. Te recomiendo repetir la operación con más de un hueso. En mi caso, de cada cinco huesos, suelen germinar cuatro.
A partir de ahí el mejor consejo es: olvídate de las semillas por unos días. Por experiencia sé que mientras menos las revises más rápido germinarán.
4. Semanas después verás los primeros signos de germinación. La magia de la naturaleza. Cuando el aguacate comience a germinar se abrirá paso a través de una raja vertical desde abajo hasta arriba de manera gradual. Cuando abras la servilleta y veas asomar la raíz por por la base del hueso te llevarás una alegría enorme, créeme. (Compártela conmigo en los comentarios, si quieres. A mi esas cosas me hacen muchísima ilusión…)
5. En ese momento, te recomiendo trasladar el hueso a un vaso con agua e introducirlo hasta la mitad asegurándote que la raíz está sumergida. Existen muchas maneras de hacerlo: pinchando cuatro palillos como soporte, con un corcho como flotador y un agujero en el centro, con germinadores especializados… Aquí te dejo varias soluciones para que pruebes.
6. A los pocos días el hueso se dividirá en dos, la raja vertical avanzará hacia la parte superior y aparecerá un tallo verde aterciopelado: el bebé aguacatero. En este momento, y antes de que la raíz se alargue demasiado, también tienes la opción de cambiarlo a un germinador más alto. Existen algunos preciosos en Amazon. Yo compré el de la foto. Además de quedar estético, podrás disfrutar de cómo va creciendo la raíz y el tallo gracias a los tubos de cristal.
Importante: No dividas la semilla. Cuando la manipules, hazlo con cuidado. La semilla estará prácticamente dividida por la mitad, pero no debe dividirse completamente.
7. Cuando la raíz posea unos 20-25 centímetros de largo, se podrá plantar el aguacate en una maceta. Esta parte, aunque parezca la más sencilla, es la que más dificultades genera y más arbolitos se echan a perder. En este post explico cómo hacerlo para que tus aguacateros no sufran lo más mínimo.
Otra manera de plantar un aguacate en 5 pasos sencillos:
El proceso de germinación del árbol del aguacate es bastante sencillo si sigues los siguientes pasos:
- Extraemos el hueso del aguacate con cuidado. Limpiamos y pelamos el hueso.
- Llenamos un vaso de agua y colocamos el hueso encima con los palillos clavados. Es importante que el agua cubra hasta la mitad del hueso.
- Esperar a que la raíz salga, suele tardar unas 3 – 4 semanas. Paciencia.
- Cuando la raíz tenga unos 10 cm. llegó el momento de sembrar: extraemos el hueso del agua, quitamos los palillos, lo colocamos en una maceta mediana y regamos. Colocaremos medio hueso dentro de la tierra y el otro medio, fuera.
- En un mes saldrán las primeras hojas. Recuerda transplantar tu nuevo árbol de aguacate a macetas más grandes conforme vaya creciendo.
Dos consejos básicos:
- El primero es no centrar los esfuerzos en una sola planta, lo ideal es probar con varias semillas a la vez.
- Y el segundo: «Adopta el paso de la naturaleza: su secreto es la paciencia«.
Estamos delante de un arbolito que puede llegar a medir hasta 12 metros, pero… a ritmo de árbol. Eso quiere decir que una vez plantado pasarán al menos tres años para que produzca sus primeras flores, y otros dos más para cultivar los primeros frutos del mismo.
¿Preparado para tener tu propio bosque
de aguacateros en casa?
Para cualquier duda, podéis consultar este vídeo donde explica la manera más rápida de sembrar un aguacate.
